Entrevista a MARÍA, de la Casa Rural "La Era de la Tía Donata"

1.- ¿Puedes explicarles a nuestros lectores dónde nos encontramos exactamente?

Lo primero de todo Rafa, es darte las gracias por contar con nosotros, es un placer compartir con vosotros estas líneas.

Nos encontramos en En Campillo de Ranas, en pleno corazón del valle de los Pueblos Negros, donde está ubicada nuestra casa. Situada a las afueras del pueblo y rodeada de bosques de robles y jaras encontrarás un lugar en el que descansar y quitarse el estrés frente al calor de una chimenea de leña y al abrigo de cómplices fallos de cobertura en el móvil.

La Era de la Tía Donata es una casa rural para parejas y familias situada a algo más de una hora de Madrid. Somos una joven pareja con dos hijos que vivimos en una zona contigua de la casa y estaremos encantados de tenedles como huéspedes.

2.- ¿Cómo arrancó vuestra casa rural? ¿Cúales fueron los principales problemas a superar para comenzar?

Es una historia tan curiosa como bonita. Arrancó con el cumpleaños de mi madre. Hace unos catorce años invitamos a mi madre por su cumpleaños a pasar el día por los Pueblos Negros de Guadalajara, empezando la mañana  por la otra vertiente del Ocejón: Valverde de los Arroyos, terminando por el Oeste de dicho pico.

Así conocimos la Comarca de la Arquitectura Negra, uno de los pocos enclaves cercanos a Madrid aún sin corromper por la mano del hombre. Nos quedamos tan embelesados por la belleza de cada rincón de estos pueblos que decidimos dejar los trabajos que en esos momentos teníamos en la ciudad y compartir el ritmo pausado de vida de sus habitantes.

Al principio fue todo como la seda, no tuvimos muchos problemas para acceder a distintas propiedades en venta (tanto parcelas por edificar como edificios para rehabilitar) en distintos barrios de la dicha arquitectura, además la parcela que finalmente adquirimos se encontraba muy bien situada, lo suficientemente grande como para construir la casa y dejar espacio para un buen jardín y lo mas importante a muy buen precio. Enseguida encontramos un constructor que se adecuaba a lo que estábamos buscando.

El ayuntamiento nos ayudó en todo lo posible, de hecho fue el alcalde el que nos habló de la parcela en la que finalmente construimos la casa rural.  Pero no todos los finales son tan idílicos como los inicios, al final tuvimos problemas con el constructor y a la hora de cobrar una subvención pero gracias a nuestra persistencia todo quedó en agua de borrajas.

3.- ¿Por qué de un alojamiento rural? Háblame un poco de lo que ofrecéis… ¿Qué tipología tienen vuestros clientes? ¿ Son similares todo el año?

Buena pregunta, en principio al conocer la zona teníamos claro que queríamos pasar unos años aquí, (ya son casi 11), pero ¿de qué viviríamos?. Como vecinos de una ciudad lo que se dice conocimientos de ganadería y de agricultura no teníamos demasiados…. Por lo que aprovechamos dos situaciones: la primera de ellas era que todavía se daban  facilidades a nuevos emprendedores en alojamientos rurales y la segunda y la mas importante tanto a Javier y a mí nos gusta mucho el trato con la gente.

Por ello nuestro alojamiento no es un alojamiento de alquiler íntegro, sino que es un alojamiento de alquiler compartido. Funcionamos por así decirlo como un hotel, pero con la particularidad que es mucho mas familiar, mas acogedor. El vivir en una zona contigua a la casa rural nos da la posibilidad de ofrecer, por ejemplo, a media tarde un tecito caliente con unas pastas caseras y a su vez los clientes no se sienten “incómodos” al tener  sus instalaciones independientes de las nuestras.

La casa consta de seis habitaciones, todas ellas totalmente equipadas, con tv, dvd y cuarto de baño independiente, situadas en la primera planta, exceptuando una de ellas, para la comodidad de aquellas personas que les supone un esfuerzo subir escaleras.

Dispone de un comedor provisto de frigorífico y microondas donde damos los desayunos y cenas (ofrecemos media pensión en régimen de cenas). El salón dispone de chimenea, biblioteca,  información de la zona, Wifi, colección de dvds, y juegos de mesa para el disfrute de nuestros huéspedes.

Al ser un alojamiento compartido no de alquiler íntegro, si no de alquiler por habitaciones, la mayoría de nuestros clientes suelen ser parejas o familias, aunque también tenemos grupos porque al ofrecer media pensión en régimen de cena es muy cómodo para aquellas personas que salen de la ciudad a desconectar y a descansar de la vida cotidiana. El turismo de esta zona suele ser turismo de fin de semana.

4.- ¿Qué actividades de ocio os solicitan mas?

Generalmente la mayoría de los clientes que llegan a la casa los fines de semana son de ciudades como Madrid, vienen a descansar y lo que mas les apetece es darse paseos sin hacer grandes distancias,  suelen recorrerse los pueblos andando por los senderos que están señalizados, subir al Pico Ocejón, disfrutar de la casa, ver por la noche las estrellas ya que en la ciudad no se disfrutan tanto por la contaminación lumínica y sentarse al lado de la chimenea, en fin, cosas sencillitas, hace unos años en Campillo de Ranas había una empresa de multiaventura con monitores de senderismo, trecking… pero parece que a la gente le daba reparo pagar por darse un paseo. Lo que últimamente me da la sensación que la gente reclama son actividades micológicas.

5.- ¿Qué es lo mas raro que os ha pedido un cliente?   

Lo mas raro que nos ha pedido un cliente, veamos…. en una ocasión nos llegaron a decir que se traían sus colchones para que el alojamiento les saliera mas económico.

6.-¿Qué feedback tenéis de los clientes?

Si con feedback te refieres a la respuesta de nuestros clientes, a los resultados obtenidos al cabo de los años, creo firmemente que es un feedback positivo. De hecho al principio por lo que se guiaba la gente para venir a casa era por “Top Rural”, hoy en día es por el “boca a boca” y por las opiniones que los huéspedes plasman en distintas páginas de internet.

7.- Dime lo que mas te gusta y lo que menos de este tipo de negocio.

Me encanta preparar la casa para recibir a mis clientes, cocinar para ellos, el hablar con ellos, prepararles un cafecito a media tarde y a los niños unas palomitas y lo que menos me gusta limpiarrrrrrrrrrr.

Muchísimas gracias por todo, un abrazo.